Su tercer viaje en lo que va del año ha realizado el CEO de Apple, Tim Cook a China, y en esta oportunidad, el objetivo no es interactúar con los usuarios de las tiendas de Apple Store o lo «rock-star» sino que a un objetivo muy claro y preciso y que dice relación con negociar con el gobierno de ese país, la implementación rápida de Apple Intelligence.
Apple no puede ofrecer esta herramienta en China pues primero, debe contar con el beneplácito de la autoridad, y segundo, el mismo gobierno exige que toda empresa extranjera se asocie con alguna firma local e invierta a largo plazo en el país en este apartado.
Cook, quien está en China desde el lunes pasado, discutirá asuntos relacionados con la cadena de suministro con el primer ministro Li Qiang y su agenda considera reuniones con los proveedores sobre las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China.
Según el Financial Times, una fuente considerada uno de los principales reguladores tecnológicos chinos, Apple está trabajando para sortear las complejas regulaciones de China y obtener la autorización para implementar Apple Intelligence a sus dispositivos vendidos en el país, pero los obstáculos para cualquier empresa estadounidense para hacerlo por sí sola son insuperables.
La fuente de la Administración del Ciberespacio de China dijo que Apple enfrentaría al menos un proceso de aprobación largo y complejo, pero en cambio, si hay una asociación local, el proceso cambia a una «aprobación simple y directa» con Baidu, así como con los grupos tecnológicos ByteDance y Moonshot.
Del mismo modo, Apple está presionada en China, pues las ventas de iPhones en ese país siguen bajas y han sacado a la compañía de los primero cinco lugares, enfrentandose a Huawei, Xiaomi y Honor.