Mario Romero.- Si Estados Unidos aplicó un veto tecnológico contra Huawei y otras empresas, ahora la mano viene de vuelta, en una clara demostración de medición de fuerzas entre ambas potencias.
La revancha la ha tomado China, prohibiendo el uso de procesadores Intel o AMD en los computadores que se usan en la administración del Gobierno del PC Chino, lo que abarca cerca de 500 mil equipos.
Según reporta Nikkei Asia, la medida involucra el retiro de PCs y y servidores gubernamentales, mientras Beijing intensifica una campaña para reemplazar la tecnología extranjera con soluciones locales.
Con ello también busca dejar de lado el sistema operativo Windows de Microsoft y el software de bases de datos fabricado en el extranjero en favor de opciones nacionales.
El Ministerio de Finanzas y el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT) ordenan a las agencias gubernamentales y órganos del partido por encima del nivel municipal que incluyan criterios que exijan procesadores y sistemas operativos «seguros y confiables» al realizar compras.
La medida implementada por el Estado para alejarse del hardware extranjero afectará a la política estadounidense. empresas en China, empezando por los principales fabricantes de procesadores para PC del mundo, Intel y AMD.
China fue el mercado más grande de Intel el año pasado, proporcionando el 27% de sus US$54 mil millones en ventas y el 15% de los US$23 mil millones en ventas de AMD.