Hace varios años se empezó a hablar de la impresora 3D, pero no todos se animan a tener una en casa. Lo cierto es que hay varias opciones en el mercado y pueden resultar realmente muy útiles.
Sin embargo, como todo tipo de artefacto electrónico, es importante tener en claro para qué será utilizada y así poder elegir la que mejor se amolda a las necesidades de cada persona.
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La impresora 3D permite crear un objeto tridimensional a partir de un diseño digital. De esta forma, el aparato se conecta a la computadora y en vez de imprimir una imagen plana en 2D, la máquina comenzará a trabajar para hacer de ese diseño un objeto real.
6 datos sobre las impresoras 3D
Antes de ponerse en gastos, es importante saber las características principales de las impresoras 3D para luego poder poner en comparación los distintos modelos. Sólo así sabrás cuál es la máquina más indicada para tu hogar o emprendimiento.
Frecuencia de la impresión
Si la impresora 3D será tu fuente de trabajo, lo más probable es que le des mucho uso. En este caso, es importante conseguir una impresora potente y de alta durabilidad. En este caso, un mayor costo implica mayor calidad, pero valdrá la pena y será una gran inversión para evitar que el equipo se averíe pronto.
Volumen
El tamaño de los objetos a imprimir influye en el costo de la impresora. Un aparato hogareño está pensado para imprimir objetos pequeños. Si este es el objetivo, una impresora 3D económica será suficiente. Pero si se utiliza para un proyecto de mayor tamaño, entonces habrá que ir por una opción más cara pero rendidora.
Materiales
Así como con las impresoras 2D se debe tener en cuenta el tipo de cartucho que se va a utilizar, aquí es importante conocer los materiales compatibles con la impresora 3D que se adquirió. La mayoría utiliza un material llamado PLAy también otros polímeros. Sin embargo, para trabajos más resistentes y a altas temperaturas, es necesario utilizar un material especial llamado TPU o ABS. En este caso, no todas las impresoras son compatibles.
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Calidad del acabado
Este punto es muy importante, sobre todo si la impresora será utilizada para un emprendimiento laboral. Claro está que hoy en día la mayoría ofrece acabados muy bonitos y de calidad. Para entender cómo se verá el acabado, es importante entender que la impresora 3D imprime en capas, una sobre la otra. Cuanto más finas sean las capas, mejor será el resultado final.
Por otro lado, la cantidad de cabezales también influye en el acabado. Una impresora hogareña probablemente tendrá un solo cabezal y con eso será más que suficiente. Pero si el trabajo requiere mayor complejidad, lo mejor será optar por un aparato con más de dos cabezales que funcionen de forma independiente.
Costo de los filamentos
Los repuestos son una parte fundamental del uso de la impresora. Aquellas que utilizan repuestos universales son ideales, ya que son muy accesibles y de buena calidad. Sin embargo, hay máquinas que precisan repuestos originales y propios de la marca. Esto aumenta el valor y, en algunos casos, es difícil conseguirlos.
Software
Es a través del software que la impresora recibirá la orden de qué imprimir y cómo hacerlo. Lo ideal es poder ver una demostración previa para ver cómo funciona y cuáles son las opciones que brinda. Esto influye también en el proceso de impresión y el resultado final del objeto.
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Con todas estas consideraciones, podrás elegir una impresora 3D de calidad y que se amolde a tus necesidades. Como habrás visto, no siempre es necesario ir por la opción más cara. Pero si estás pensando en un proyecto laboral, ¡es hora que te animes a invertir para tu futuro!
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