De acuerdo a un reporte de Reuters, la administración del Presidente Biden está preparando una movida estratégica para evitar que la industria china de tecnología crezca más que la estadounidense.
Aparentemente, la Casa Blanca está preparando un nuevo conjunto de sanciones que pueden detener las exportaciones de semiconductores de menos de 14 nm con capacidades de IA, así como herramientas para la fabricación de chips.
Esto parece ser una respuesta directa a los recientes avances realizados por la industria china de semiconductores.
Después de la casi desaparición total de Huawei, las empresas chinas se movilizaron para fortalecer las capacidades de fabricación de conjuntos de chips del país.
Por otro lado el gobierno chino está considerando medidas estrictas para obligar a las empresas a invertir en chips chinos.
Es por ello que ha intervenido el propio Departamento de Comercio para proponer, bajo el manto de una «colaboración» suavizar o incluso hasta eliminar la actual condición de veto que impera sobre Huawei, pero hay que verlo a largo plazo, pues son parte de una negociación no tan simple como puede verse desde este lado.
El Departamento de Comercio ya envió cartas a algunas de las grandes empresas de la industria que trabajan con China y proporcionan chips a empresas con sede en en ese país.
Se incluyen NVIDIA, AMD e Intel. La mayoría de las empresas ya han reconocido estas cartas. Sin embargo, no hay un pronunciamiento aún. Aparentemente, la medida requerirá que las empresas estadounidenses solo trabajen con China una vez que el Departamento de Comercio las haya aprobado.
Por lo tanto, Estados Unidos está restringiendo el negocio, pero no prohibiendo por completo que las empresas trabajen con China.
Una vez que se haga oficial, la situación será más complicada para cualquier empresa que trate con China en el negocio de los chips.
Otras empresas que también pueden necesitar cumplir con las nuevas reglas incluyen Dell, HP y Super Micro Computer. Estos no son fabricantes de chips, pero también se les puede negar el acceso a China debido al uso de chips estadounidenses.
Todo esto, es parte de una guerra comercial, donde ambas potencias están obre un tablero de ajedrez con una partida que está lejos del jaque mate, pero al menos hay nuevos gestos para las firmas chinas.
No habría que sorprenderse si Google vuelve a Huawei en el largo plazo, lo que aunque parezca una paradoja, podría generar hoy un verdadero desastre a Huawei y de paso a Honor.
