El ambiente de trabajo tiene un impacto significativo en la productividad. Por ejemplo, si un empleado no se encuentra en el entorno adecuado, no podrá concentrarse y podría estresarse. Esto puede conducir a una disminución en su productividad general.
En un ambiente de trabajo positivo, es más probable que las personas se comprometan con su trabajo, se sientan apoyadas por sus superiores y colegas y tengan un mayor control sobre lo que hacen. En tal entorno, es más probable que las personas sean productivas y se desempeñen mejor en el trabajo.
Es imperativo que los empleadores creen un espacio de trabajo cómodo para los empleados donde puedan sentirse valorados y motivados para desempeñarse bien en el trabajo.
Por eso muchas empresas contratan el servicio del diagnostico de clima laboral.
Esta nota da algunos consejos sobre cómo mejorar el ambiente de trabajo para aumentar la productividad.
¿Cómo está afectando el entorno laboral a la productividad?
El ambiente en el trabajo puede ayudar o perjudicar a los empleados en términos de su productividad.
Para aumentar la productividad en el lugar de trabajo, es importante crear un entorno de trabajo productivo y colaborativo. Esto significa que los empleados deben sentirse seguros y protegidos, necesitan acceso a los recursos y deben poder hacer su trabajo sin ser interrumpidos con demasiada frecuencia.
La mejora de las relaciones entre los compañeros de trabajo contribuye a mejorar la moral de la plantilla en su conjunto. El aumento de la moral conduce a un entorno de trabajo más positivo.
Cuando los empleados están contentos en el trabajo, participan activamente en las tareas y se centran menos en comportamientos de evasión -largas pausas para tomar café o fumar, navegación personal por Internet, por ejemplo- que pueden impedir que los trabajadores terminen sus tareas a tiempo.
Un aumento constante del compromiso activo a lo largo del tiempo gracias a la mejora de la moral puede aumentar la productividad de los empleados. El hecho de que los trabajadores terminen sus tareas con mayor rapidez puede contribuir a aumentar los ingresos de toda la empresa.
¿Cómo está afectando el liderazgo al clima laboral y a la productividad?
El liderazgo también tiene un gran impacto en el clima laboral y, por tanto, en la productividad de los empleados.
Los líderes deben ser conscientes de cómo están afectando la productividad de su equipo. Necesitan predicar con el ejemplo y establecer objetivos claros para su equipo. Los líderes también deben comprender los conjuntos de habilidades de los miembros de su equipo y asignar tareas en consecuencia.
Tips para mejorar el ambiente de trabajo para mejorar la productividad
Es importante tener un buen clima laboral para mejorar la productividad. Estos son algunos de los tips para conseguirlo
Escuchar y compartir
Dedique tiempo a consultar a los empleados sobre las decisiones clave, pero asegúrese también de que el personal en general sienta que puede compartir las ideas que tenga. Puede establecer un método o un momento específico para ello, o simplemente fomentar una cultura en la que ninguna idea sea demasiado tonta y la gente se sienta cómoda de poder innovar de forma segura.
Comparta información con los miembros del equipo sobre lo que ocurre en la organización, y fomente y facilite el intercambio de conocimientos o habilidades.
Fomente la conciliación de la vida laboral y familiar
El presentismo conduce a la reducción de la productividad, así como al resentimiento y a la disminución de la motivación, así que haga lo posible por desalentar este tipo de cultura.
Del mismo modo, si los empleados se sienten capaces de trabajar desde casa, de tomarse tiempo libre para acudir a citas médicas o para tratar asuntos familiares, o pueden trabajar con horarios flexibles en función de sus necesidades personales, esto conduce a una mayor lealtad y niveles de satisfacción del personal, lo que se traduce de nuevo en una mayor productividad y una mejor retención del personal.
Facilitar la interacción social
Un equipo que tiene una buena interacción social, tanto dentro como fuera del trabajo, tiende a trabajar mejor juntos, a ser más felices y a colaborar más eficazmente. Puede facilitar esto organizando eventos como fiestas de Navidad y reuniones de verano, pero también fomentando eventos sociales más discretos como comidas de equipo, grupos de corredores o ciclistas, reparto de pasteles o incluso un coro en el lugar de trabajo.
Las jornadas de formación de equipos fuera de la oficina, las reuniones informales periódicas y otras ideas que alejan a los empleados de sus escritorios y les hacen hablar entre sí pueden crear relaciones que hacen del lugar de trabajo un entorno más feliz, además de redundar en beneficios laborales gracias a una mejor colaboración.
Mostrar aprecio y apoyo
Asegúrese de que el personal sabe que está haciendo un buen trabajo y que recibe reconocimiento por ello. Esto puede ser tan sencillo como un simple agradecimiento o un «bien hecho» por algo pequeño, o puede ser un agradecimiento público en una reunión de equipo, un comentario positivo en una reunión individual o incluso un premio o una bonificación.
Considere el nivel de apoyo que está dando al personal y asegúrese de que quienes lo necesitan lo reciben, y de que quienes están bien sin él se sienten capaces de solicitarlo. Dé prioridad al desarrollo y la formación del personal, y asegúrese de que cuando un miembro del equipo aprende una nueva habilidad, tiene la oportunidad de ponerla en práctica lo antes posible.