Un informe del sitio taiwanés DigiTimes afirma que los proveedores de componentes para los nuevos iPhones de Apple no han reclamado ningún recorte en los pedidos en lo que va de año, desmintiendo de ese modo, las alertas sobre el particular realizadas el día de ayer por el medio estadounidense Bloomberg.
Si bien podrían presentarse interpretaciones en relación a los números que entregan Foxconn, TSMC o Broadcom, existe amplio acuerdo de que hay amenazas sobre la producción de los productos de Apple y las proyecciones de entregan son una buena señal, pues los iPhone 13 Pro y el iPhone 13 Pro Max, por ejemplo, están con entregas para tres semanas o incluso hasta un mes para entrega.
El Apple Watch Series 7, que saldrá a la venta este viernes en cerca de 30 países, también está experimentando retrasos en los envíos, con entregas incluso para diciembre.
Y los problemas de escasez de chips se suma en China nuevas regulaciones energéticas que condicionan los horarios de producción de las fábricas.