El ahora fabricante de teléfonos independiente Honor, tras su venta de Huawei en noviembre pasado, enfrenta su mayor desafío en los próximos meses, más allá que lleguen a Chile, sin saber aún con cuáles teléfonos y si acaso, podrán tener acceso a los servicios de Google, algo clave, al menos en varios mercados, que cuestionan a Honor de «demorar en demasía» su arribo al mercado occidental, más allá de los retrasos de chips.
En diversas entrevistas a medios chinos, el CEO de Honor, Zhao Ming, advierte sobre el acaparamiento de inventario de sus competidores y que es algo que le hace mal al negocio, pues se corre el riesgo de quedar con los productos como inventario y eso es la muerte del negocio y se aventuró en señalar que «los próximos meses son precisamente el momento más peligroso para ello».
Además, también anticipa que el teléfono de gama alta de Honor 50, «se está puliendo» y se espera que se lance a mediados de este año y puede funcionar mejor que las series Huawei P y Mate, y que «el hardware Honor tiene mejores capacidades de base de hardware pues el sistema, el diseño estructural, la tecnología fotográfica o la tecnología de la comunicación y la experiencia general y la puesta a punto de todo el sistema, no hay nada que no podamos hacer».
Será clave entonces que desde Honor, apuren el tranco y pasen a la fase de definiciones y de llegadas globales, incluyendo nuestro país, pues si será un marca sin Google, no se avisora en absoluto una buena y grata bienvenida, al menos en Chile, no.
