A los teléfonos plegables de Samsung y Huawei, se espera que dentro de los próximos días se sume Xiaomi con un inesperado Mi Mix, mientras Apple sigue acumulando intenciones de tener el propio y sumando cada vez más patentes de diseño, las que como bien se sabe, no necesariamente representa un producto comercial.
Es un hecho que en algún momento llegará un iPhone plegable, pero probablemente se opte por una solución intermedia de doble pantalla, como se vio con el LG G8 o bien resolver de buena forma el sistema de bisagra que siempre ha sido cuestionado por los pliegues y la fragilidad que genera en este tipo de dispositivos.
Bien lo sabe Samsung que debió lidiar con los fallos de su primer Fold, de lo cual sacó importantes lecciones que hoy lo sitúa como el referente en este tipo de teléfonos, aún incipiente y de absoluto nicho. Mientras se consolida, Apple sigue trabajando en el apartado técnico, y se han mencionado anteriormente que existen dos prototipos funcionales en manos de ingenieros.
Por el momento, la firma ha inscrito otra patente que es descrita como un mecanismo con ruedas dentadas las cuales le proporciona a Apple un mejor control de la operación de cerrado y apertura del eventual plegable, cuyo mecanismo podría actuar con otras piezas y componentes para acompañar y apoyar a la pantalla en las posiciones más vulnerables.
En la patente, Apple lo consigna como una tecnología que incluso puede ir más allá del iPhone o el iPad y llegar a su Apple Watch y AirPods, otros.