Durante meses se han recibido regularmente noticias y rumores de que la firma surcoreana LG estaba en negociaciones de venta de su unidad de negocios de teléfonos inteligentes debido a pérdidas por 23 trimestres consecutivos, pero con ocasión de CES de enero, se mostró un nuevo dispositivo, el que sería el primer teléfono enrollable del mundo y que debería estar en el mercado este mismo año.
A dos meses de entonces, el panorama ha ido complicándose aún más para LG, pues su venta fracasó porque el precio exigido era demasiado alto y un reporte de Bloomberg, de este lunes, señala que la surcoreana definitivamente optaría por cerrar su negocio de teléfonos inteligentes en lugar de la venta.
Además, LG ha suspendido sus planes de lanzar todos los nuevos teléfonos inteligentes en la primera mitad del año. En otras palabras, debido a que LG no ha encontrado un comprador adecuado para hacerse cargo de su negocio de teléfonos inteligentes, tuvo que cerrarlo.
En su momento, el CEO de LG Electronics, Kwon Bong-seok, dijo que la compañía había considerado todas las opciones para un negocio con pérdidas y señaló que la competencia en el mercado mundial de dispositivos móviles se está volviendo más feroz, tomando en consideración de que era hora de que LG hiciera un juicio frío y tomase la mejor decisión.
Las variables eran la venta, la suspensión o el cierre definitivo de la división móvil y los reportes más frescos desde Asia apuntan a que LG definitivamente ha decidido el cierre de su área móvil