Uno de los sectores donde EE.UU ha perdido terreno y competividad es en el campo de los procesadores, pese a que cuenta con verdaderos gigantes, como Intel, AMD, Qualcomm y otros, pero en cuanto a desarrollo está muy por detrás de China en la fabricación de chips.
La situación ha llegado a un punto de quiebre donde el propio nuevo gobierno de EE.UU. está trabajando en nuevas formas de impulsar el sector y fomentar la fabricación local.
En línea con eso, el Senado de los Estados Unidos está considerando incluir un nuevo proyecto de ley para impulsar la competitividad contra China para las medidas aprobadas previamente para impulsar la industria de fabricación de chips del país.
Una ayuda financiera por US$ 30 mil millones incluiría elementos para impulsar el sector tecnológico y se espera que el proyecto de ley se someta a votación completa en abril.
Según diversos reportes, es probable que el paquete tenga disposiciones para frenar el acceso de China a los mercados de capitales estadounidenses, como ya se ha hecho saber con una disposición contra Xiaomi y se suma una propuesta para proporcionar fondos por US$ 100 mil millones para impulsar la investigación en áreas tecnológicas clave, desde la inteligencia artificial hasta la computación cuántica y los semiconductores.
La industria de los semiconductores también ha estado presionando para obtener un crédito fiscal a la inversión para invertir en herramientas de semiconductores, que pueden costar miles de millones de dólares para nuevas fábricas y con ello, recuperar la competividad.
