Tomando consideración la loca geografía de Chile, un trozo largo y delgado de tierras, con recovecos, que se sostiene entre la cordillera de Los Andes y el mar Pacifico que de tranquilo no tiene nada, pues nos azotan terremotos y maremotos, pero que además han inspirado a poetas y artistas, con un variopinto de climas y paisajes, es sin lugar a dudas un escenario para muchos, idílico, y sin duda que Chile lo es.
Pero en el ámbito de las telecomunicaciones es un tanto complejo poder llevar todo tipo de señales, y con el advenimiento no solo de las primeras redes móviles, hasta las 6.500 antenas que se deben desplegar para implementar el 5G, no deja de llamar la atención que muchos pueblos, localidades y sectores rurales no tengan acceso a internet, ya sea móvil o de hogar.
En algunos países como EE.UU, Japón o en nuestros vecinos de Argentina, se han implementado servicios de internet vía satélite, una opción que HugesNet ha querido implementar en Chile, pero su alto costo y sus limitaciones de uso, le han impedido poder expandirse como se tenía planeado desde un comienzo, replanteándose la operación comercial en el país.
A 23 kilómetros de la capital chilena se encuentra la comuna de Colina, que aun mantiene zonas agrícolas y que en diez años han proliferado condominios y construcciones que superan los millones de dólares, pero que ha tenido serias dificultades de conectividad de fibra o ADSL, rebajando la plusvalía de propiedades costosas y que impidió a muchas familias poder realizar labores de teletrabajo de manera normal.
«Hughesnet pudo ser buena idea, pero me condicionaban el horario que se me permitía navegar y el problema de fondo que me hizo descartarlo finalmente, fue la limitación de datos» nos comenta una vecina del Condominio Los Alamos en Liray de esa comuna de la región metropolitana.
SATELITES CON MARCA REGISTRADA
En diciembre pasado llamó la atención que una filial del multimillonario y excéntrico CEO de Tesla, Elon Musk haya solicitado audiencia con SUBTEL para ofrecer sus servicios de internet satelital proveídos por SpaceX, mediante la empresa Starlink, con la diferencia es que sus emisarios se reunieron con la autoridad, se les concedieron las autorizaciones correspondientes.
Para poder operar, la firma planea la instalación de siete estaciones satelitales ubicadas entre la Región de Atacama por el norte hasta la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena al sur, las que harán uso de la Banda Ku.
Cabe señalar que el conglomerado ya tiene inscritas en INAPI las marcas Space X y Starlink,
CÓMO OPERA?
En Chile, la razón social de Starlink es Tribo SpA, según se desprende de la inscripción y concesión otorgada a 30 años en Chile la que fue publicada en el Diario Oficial y que contó con todas las autorizaciones desde SUBTEL, organismo que entregó los plazos de inicio de despliegue técnico hace 30 días, por lo que se desprende que debería estar en operaciones dentro de este mismo año.
El servicio de internet satelital de Starlink está disponible desde hace un par de meses en EE.UU y Canadá a un precio mensual de US$99.- (CLP$ 78.000.-) y hay que contar con US$500 (CLP$350.000.-) por concepto de hardware y kit de instalación de la antena.
Cada kit Starlink incluye un terminal de satélite, un pequeño plato que apunta a la malla de satélites en órbita y un trípode de montaje, al cual se suma un router, que se conecta mediante un cable al terminal. El router está diseñado para colocarse en el interior, donde permite que los dispositivos se conecten por Wi-Fi para tener acceso al servicio de Internet.
El servicio además ofrece una app para iOS y Android que ayuda en la instalación y posterior configuración del sistema que entre otras cosas permite que el «plato» se ajuste automáticamente y se mueva según donde tenga que apuntar para tener mejor cobertura con los satélites de Starlink.
Se asume que ya con la infraestructura montada para Chile, sería cosa fácil conectarse. Eso sí, se debe tener en cuenta que desde la misma empresa advierten (para bien y para mal) que el usuario podrá tener velocidades de datos que varíen de 50 Mbs a 150 Mbs con una latencia de 20 ms a 40 ms y del miso modo habrá breves períodos sin conectividad en absoluto.
Es importante consignar que el servicio en Chile no es en absoluto exclusivo, pues se está expandiendo en todo el cono sur y el resto del mundo en la medida en que SpaceX, la matriz de este proyecto, siga poblando la órbita terrestre con sus satélites.
