Mario Romero – Editor TransMedia.cl.- Una de las mayores peticiones hechas desde nuestra vitrina, cuando se planteó el proceso de licitación de 5G que comenzó con la entrega de bases en octubre pasado, era la esperanza de que los oferentes y operadores, mantuvieran estrecha comunicación con la autoridad, y desde ahí poder plantear sus diferencias, y evitar que el proceso termine en tribunales.
Pues lamentablemente, esto ha ocurrido ya que según consigna DF, la compañía Movistar Chile está preparando una arremetida legal contra SUBTEL para detener a como de lugar el proceso de licitación de 5G y la firma a través de un bufete de abogados, ha presentado un recurso de más de 45 páginas a los tribunales en contra del ente estatal.
Los argumentos esgrimidos por el operador, es que se podría inclinar el incumplimiento de los límites máximos de la tenencia de derechos de uso sobre el espacio radioeléctrico, y se señala que sobre la banda 3,5Ghz, Subtel no está dando curso a un fallo de la Corte Suprema de privilegiar la adjudicación del espectro a operadores entrantes o de menor tamaño».
Si bien son términos técnicos, el fondo del problema que el solo hecho de una presentación de recurso judicial, entrampará el proceso, el cual puede extenderse sin fecha de término, que es lo que menos necesita la población, donde urge poner el acelerador a fondo para poder dar el salto tecnológico.
Es es el roadmap de 5G en Chile …. claramente las fechas hacia adelante son hoy inciertas
Es momento de sentarse en una mesa, dejar descalificaciones baratas de lado y lado donde el rol de la subsecretaria Pamela Gidi cumpla con su objetivo pues el país no está para seguir extendiendo una espera, un avance, donde los usuarios serán los perjudicados, y los tiempos de desfiles de abogados a Tribunales se suponía quedaron en el pasado.
Es acaso tan mala la base de la licitación que en un mes de su inicio ya se más relevante un escrito judicial?.
Los usuarios nos merecemos respeto, y ello debe no solo entenderlo la autoridad sino que cada uno de los oferentes, operadores y empresas de telecomunicaciones que participan en este proceso pues el país no puede esperar más tiempo para la implementación de una red avanzada de comunicaciones porque tanto uno como otro quiere «pasar de la línea» y sacar un provecho en desmedro del otro.
