Antes de la irrupción de COVID-19, sólo 18% de los empleados en el mundo tenía la opción de trabajar remotamente a tiempo completo y lo relevante de la cifra no es el 18% que teletrabajaba, sino el 82% restante que estaba impedido de hacerlo. Hoy quedarse en casa es una obligación para gran parte del planeta, y a raíz de esta nueva necesidad, el mundo apuesta por el trabajo remoto para seguir operando, en un experimento global con alcances nunca vistos antes.
Por ejemplo, durante febrero en China, el software de videoconferencias de la compañía Cisco registró 22 veces más tráfico que antes del brote del virus, mientras que en Chile, la implementación de home office en las empresas del país llegó a 72% durante la semana pasada, según un informe.
El coronavirus ha demostrado que las empresas necesitan herramientas digitales que permitan una efectiva comunicación entre los equipos de trabajo cuando no están físicamente presentes, soluciones que faciliten la productividad mientras preservan el bienestar de sus empleados.
En este sentido, la plataforma DataScope, emprendimiento chileno con más de 4 años en el mercado que reemplaza formularios de papel por una solución móvil más sustentable y eficiente, registró un crecimiento de 220% en la creación de nuevas cuentas durante marzo en comparación con el mismo mes del año pasado.
“El interés de las empresas por adaptarse a la necesidad de ofrecer a sus empleados alternativas de trabajo remoto explica en gran parte el explosivo crecimiento que ha tenido la plataforma en los últimos días”, señala Nicolás Serrano, cofundador de DataScope.
DataScope ofrece formularios móviles (disponibles de forma gratuita en Coronavirus.datascope.io que se pueden utilizar para crear listas de chequeo digitales que se envían a los equipos de trabajo, y así se puede tener seguridad de que se están tomando las medidas de seguridad necesarias para evitar contagios con los elementos de protección personal adecuados y síntomas del personal.
Al presentarse situaciones de riesgo, a través de los formularios digitales de DataScope se pueden tomar las medidas necesarias para que no se genere un brote interno y así tener que suspender las operaciones. Esto cobra más relevancia al considerar que en estos momentos hay servicios que son indispensables y no pueden detenerse como el agua, luz, mantenimiento de equipos médicos y producción de alimentos.
El hecho de poder transformar cualquier formulario en papel a digital, como órdenes de trabajo o inspecciones, explica el boom de la plataforma en estas semanas, ya que todos los datos que se recolectan en terreno quedan disponibles en tiempo real y así las personas que están teletrabajando pueden acceder a ellos fácilmente.
Otra ventaja de las herramientas digitales de DataScope es que son mucho más higiénicas que el papel, ya que no hay traspaso de virus por contacto (el cual puede permanecer más de 4 días en el papel).
También reducen riesgos como la pérdida de los formularios físicos, faltas en interpretación de datos y hasta problemas para la organización de las bases de información gracias a la digitalización de diferentes documentos, incluidos formularios, órdenes de trabajo, inspecciones, reportes, y hasta certificaciones.
En ese sentido, la implementación de alternativas digitales como DataScope en reemplazo del trabajo con documentos físicos en las oficinas no sólo aumenta la productividad hasta un 18% en promedio, sino que también impulsa una importante reducción en los costos que resulta sumamente tentadora, especialmente para organizaciones agobiadas por gastos.
“Desde un inicio, en DataScope proyectamos que el trabajo a distancia sería el futuro, y entendimos la importancia de ofrecer una alternativa digital, más eficiente y económica a los documentos en papel. En un contexto tan complejo como el actual, es satisfactorio saber que podemos ayudar desde nuestro lugar”, afirma Serrano.
Antes de la llegada del coronavirus, la tecnología ya había avanzado tanto que cualquier persona es capaz de desarrollar sus tareas diarias desde su casa. Las estadísticas muestran que este tipo de trabajo se ha expandido 10 veces más rápido que otros ámbitos, y las mismas estadísticas señalan que el número de quienes trabajan desde casa ha aumentado en un 140% desde 2005.
Ahora que las empresas comenzarán a ver los positivos resultados del sistema por sí mismas, no podrán negar a sus trabajadores la opción trabajar desde su casa, una vez que la pandemia sea historia.