El gobierno de Donald Trump emitirá una extensión de dos semanas de una licencia que permite a las compañías estadounidenses continuar haciendo negocios con Huawei según han señalado este sábado fuentes de la agencia Reuters y cuya extensión es mucho más corta que el plazo anterior de 90 días y se estaría preparando una extensión más larga, pero aún no se ha finalizado debido a obstáculos regulatorios.
Después de agregar a Huawei a una lista negra económica en mayo citando preocupaciones de seguridad nacional, el Departamento de Comercio de EE. UU permitió comprar algunos productos hechos en Estados Unidos en un movimiento destinado a minimizar las interrupciones para sus clientes, muchos de los cuales operan redes en las zonas rurales de América.
La extensión se anunciará el lunes, cuando el aplazamiento anterior expire, dijeron las fuentes, y se negaron a ser identificadas ya que la extensión no se ha anunciado públicamente.
El secretario de Comercio, Wilbur Ross, dijo a Fox Business Network que algunos operadores rurales necesitan licencias temporales y dependen de Huawei para las redes 3G y 4G y que ya hay suficientes problemas con el servicio telefónico en las comunidades rurales y que nos pretende eliminarlos por lo tanto, uno de los propósitos principales de las licencias generales temporales es dejar que esos tipos rurales continúen operando.
El desarrollo se produce en medio de discusiones entre Estados Unidos y China destinadas a llegar a un acuerdo inicial para resolver una guerra comercial que ha durado más de un año.
Como es de público conocimiento, el gobierno de los Estados Unidos dijo que tenía una base razonable para concluir que Huawei está involucrado en actividades que son contrarias a los intereses de la seguridad nacional o de la política exterior de los Estados Unidos, pero que en todo este tiempo no ha presentado pruebas al respecto, mientras que desde Huawei han negado repetidamente las acusaciones.
Por su parte, el fiscal general William Barr dijo el jueves que Huawei y ZTE Corp»no se puede confiar», ya que respaldó una propuesta para prohibir a los operadores inalámbricos rurales de EE. UU que utilicen un fondo gubernamental de US$8.500 millones para comprarles equipos o servicios.
El Departamento de Comercio también está considerando otorgar licencias individuales para que las empresas estadounidenses vendan componentes a Huawei después de recibir más de 200 solicitudes.