Falta menos de un mes para el lanzamiento del próximo Samsung Note10 y han surgido reportes que apuntan a que este dispositivo puede verse afectada por el cambio de la política comercial de Japón con Corea del Sur, medidas que se han puesto en práctica desde hace unas semanas.
Para entenderlo en contexto, Japón había eliminado a Corea del Sur de una Lista Blanca de países a los que se les concedieron procedimientos de exportación acelerados, lo que implica que las compañías que exportan materias primas críticas para la fabricación de semiconductores a Corea del Sur ahora tendrían que esperar 90 días antes de que se eliminen sus exportaciones.
Este cambio en la política ha resultado en un alza en los precios de DRAM en Corea del Sur, pese a las afirmaciones de los funcionarios de la industria de semiconductores de que el inventario de inventario de los módulos garantizará que los impactos de la prohibición en el mundo real no sean inmediatos.
El nuevo informe de cómo el bloqueo afecta a Samsung dice lo contrario y que la compañía se verá afectada por una disminución en la producción del procesador Exynos 9825, el que está asignado al Note10 para la mayoría de los países
El procesador Exynos 9825 de 7 nm tiene un tamaño de función más pequeño que su predecesor, el Exynos 9820, que está presente en la línea de Samsung Galaxy S10 y de acuerdo a lo señalado desde Sammobile, este mes, Samsung ha reducido en un 10 por ciento la producción objetivo del Exynos, un procesador móvil que se usará para la Nota 10 y se espera que la compañía apunte la producción el próximo mes pero no sabemos cómo esperan lograr eso.
En el peor de los casos, el Galaxy Note 10 puede lanzarse según lo programado, pero las ventas reales pueden retrasarse ligeramente.
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