A Chile la familia Huawei P30 llegó tan solo una semana luego de su anuncio en Londres, lo que sin lugar a dudas deja en claro lo importante que es esta plaza, este mercado para el fabricante chino.
No en vano está en la lucha por el primer lugar en ventas de teléfonos en el país, sino que ahora luce un cómodo segundo puesto a nivel mundial, superando incluso a Apple y acercándose a Samsung.
Por ello tanta expectativa en torno a los dos modelos, arropados de una gran maquinaria publicitaria mediante, hemos podido verlos en su lanzamiento y ahora gracias a Huawei Chile hemos podido probar el primer integrante, el Huawei P30 a secas.
El hermano «del medio» de la familia, y compartimos con ustedes nuestra experiencia de uso.
En primer lugar, es un dispositivo que luce una pantalla muy vistosa y amplia de 6,1″, con lector de huellas inserto en ella y una discretísima muesca en forma de gota de agua, que acoge solamente a la cámara frontal.
La resolución es solo Full HD+ lo que nos deja una sensación de «tarea pendiente», si bien ofrece buenos tonos y colores, parece ser que Huawei optó por lucirse en contar con una espalda que luce iluminada en un tono celeste degradado muy pero muy atractivo, brillante y cubierto de cristal, por lo que es altamente recomendable que se protege con la carcasa que se incluye de fábrica o bien buscar una a gusto del usuario.
Allí Huawei aloja sus tres cámaras Leica, que si se ve de pasada, podríamos tener un DejaVu con el P20 Pro del año pasado, pero la configuración de este año es diferente y su volumen es levemente más grueso, por lo que dejar el teléfono sobre una superficie plana hará saber de su borde.
Por su parte, en la parte delantera los botones están muy bien trabajados, que no sobresalen en demasía, y en la parte inferior encontramos el Jack de audio de 3,5mm, aun vivo y entrada USB-C y un parlante.
Dicho sea de paso, nos parece impresentable que por el precio del equipo solo ofrezca sonido monofónico, lo que le resta varios puntos en términos del nivel que pretende alcanzar, del segmento al que apunta, sin desmerecer sus prestaciones como un todo.
De hecho, con sus 3.400 mAh de batería, que para muchos podría resultar un tanto mezquinos, alcanza bastante, más allá de que tenga carga rápida (y bien rápida) lo que demuestra que hay un trabajo de optimización importante de por medio.
LECTOR DE HUELLAS
No da problemas, es eficiente y del tipo óptico, está bien trabajada su precisión y es sin duda el valor agregado del equipo, y si bien este P30 a secas también cuenta con reconocimiento facial, pero al menos en nuestras pruebas, nos quedamos con la huella en pantalla. Pasó bien la prueba de la blancura!
SONIDO VIA AUDÍFONOS
Con una entrada de audífonos clásica sobrevívendo a los nuevos tiempos, es ideal poder aprovecharla con unos buenos audífonos gracias a que Huawei ofrece un sonido personalizado gracias a Dolby Atmos, contando con tres perfiles predefinidos: Inteligente, Película y Música el cual ofrece la opción de la ecualización inteligente con 3 modos predefinidos, así como la personal mediante ecualizador gráfico.
No hay Radio FM para los nostálgicos.
ANDROID Y EMUI
El Huawei P30 viene de la mano de Android Pie con EMUI 9.1 que a nuestro gusto y juicio, no molesta, es agradable y de diseño atractivo, pues permite acceder a las tareas propias del teléfono como a sus diversas opciones de configuración.
EMUI es altamente personalizable pero también hay bastante bloatware o «sobraware».
EL PLATO DE FONDO : LA TRIPLE CÁMARA LEICA
Huawei P30 gracias al soporte de Leica, apuesta este año con tres cámaras principales: una con sensor de 40 MP (f1.8), otra con sensor de 16 MP (f/2.2, ultra gran angular) y una tercera con sensor de 8 MP (f2.4) y que es el encargado de ofrecer un zoom 3X además estabilizado con OIS. (No hay lente B/N)
En cuanto a la cámara secundaria, es única y de 32 MP y f2.0.
Acá una pequeña crítica constructiva : Huawei debería reorganizar el diseño de las tantas opciones de cámara, siendo bastante incómodo recurrir hasta el apartado de «Más» para recién lograr encontrar el HDR. (Eso ya es bueno que lo mejoren)
De los resultados, pues nada que se pueda criticar, transformándose acá en la mejor cámara triple (hasta ahora) en un teléfono Android, pues nos da la sensación de que si nos sacaron el modo B/N, mejoraron el zoom, y las tomas Modo Noche son insuperables, solo comparables con lo que hemos visto en los Google Pixel. No en vano todos los usuarios de Android, buscan emular esa característica.
Eso si, la «magia» también tiene letra chica pues hay que tener en cuenta que la máxima resolución de 40 MP solo es posible con el modo Foto normal y el modo Profesional y los demás no admiten más de 10 MP de resolución
Y si bien en fotografía Huawei sigue manteniendo el cetro, (de día o de noche, pese a que aún faltan detalles como mejorar el modo retrato) en el modo de video, queda al debe en términos de claridad, estabilidad y sus formatos de grabación, sobretodo para aquéllos que gustan del 4K.
Quizás con una actualización de software se logren mejoras en ese apartado, pues en algunos videos tuvimos desfases de audio que no fueron muy gratos.
CONCLUSIONES
Un dispositivo muy bien construido, liviano, compacto, frágil, hermoso, caro y además es en este modelo en particular, la evolución del P20 Pro que vimos el año pasado, con un mejor procesador aún, memoria y el mismo almacenamiento, que sin lugar a dudas sigue siendo un referente en la fotografía, (por algo la letra P) pero que también por ese precio (CLP$699.990.- oficial) podemos pedirle más en video a menos que Huawei tenga pensado una línea V40 en próximas entregas (parece que ese nombre ya lo usan por ahí)
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