Un dato no menor : Tan solo en 2018 se vendieron 139 mil cámaras de lentes intercambiables en Latinoamérica, modelos que hasta solo un par de años atrás eran considerados exclusivos para profesionales o expertos en fotografía.
Si bien es cierto que los celulares han reemplazado el uso de cámaras fotográficas especialmente a las más compactas, es importante ver como el segmento de Formato Completo (full frame) es el único que muestra un crecimiento del 57% en comparación con el 2017.
Hoy es extraño encontrarse con un teléfono que solo tenga una cámara trasera, salvo contadas excepciones como el Google Pixel 3XL o el iPhone XR, donde su «apuesta» fotográfica pasa por el software que va incluido en la cámara.
Otras opciones en el mercado actual nos ofrecen desde cinco cámaras como es el caso del Nokia PureView9 y los recientes Huawei P30 Pro con cuatro y Samsung S10+ con tres.
Tras conocer de sus características en el apartado fotográfico, los avances son innegables, pero para los más puristas un celular por muy inteligente y por muchas cámaras que incorpore seguirá siendo un celular.
Si la industria móvil está dando avances innegables en el área fotográfica, con sensores Sony, lentes software Leica o Zeiss, el impedimento para lograr mejores tomas pasa por un concepto tan simple como es el físico.
Para conocer la opinión de un fabricante de cámaras «tradicionales» o como muchos otros le llaman «cámaras de verdad», conversamos con Angelo Marconi, Gerente Regional de la división Digital Imaging de Sony quien muy amablemente nos atendió vía WebEx desde Ciudad de México.
«Es innegable el avance que ha tenido la industria móvil, Sony ha formado parte de ella también, pero sabemos cuáles son las limitaciones de la fotografía en los celulares por mucho que nos hablen de Inteligencia artificial, o de más y más lentes», nos cometa Angelo.
Además, realiza un ejercicio : «SI hoy consideramos que los teléfonos de gama alta llegan a los países de América Latina a un precio estimado de US$1.500.- perfectamente podrías pagar menos de la mitad de ese valor por un teléfono que cumple con su función como tal y lo relacionado con redes sociales y por un promedio de US$400o US$500 podrías empezar a involucrarte en el campo de la fotografía real, como debe ser».
Hoy los fabricantes de teléfonos celulares nos brindan opciones visuales que tienen su limitación técnica natural, y que tan solo con cámaras semi réflex o incluso de entrada en el segmento Pro, pueden brindar mejores resultados, en términos de calidad, y de hecho se está dando el caso que muchos usuarios están aprovechando que nuestras cámaras incorporan WIFI y desde su celular solo publican el contenido.
Además, agrega el ejecutivo, mucho contenido publicado en redes sociales comprimen o degradan el contenido para así hacer que el envío sea más liviano, pero eso al final mata la calidad.
Además Marconi llama la atención de que las cifras que manejan en cuatro países de América Latina, como Chile, México, Brasil y Colombia están dando señales claras de un «regreso a lo clásico» y esto según el ejecutivo obedece a que : «El usuario empezó con un celular a hacer fotos, le fue gustando y también fue descubriendo que los resultados esperados, ha medida que iba conociendo métodos y técnicas, no se lo iba a dar un celular y por ello llega hasta nosotros».
Nosotros nos preocupamos de «evangelizar» a los interesados, y de hecho pueden hacer cursos gratuitos con nosotros para ir aprendiendo y descubriendo nuevas herramientas que solo la fotografía digital brinda, partiendo con cámaras a precios que son bastante menores de lo que se piensa, considerando que es un mundo totalmente aparte de lo que ofrece un teléfono inteligente, sin que por ello sea malo, pues en ningún caso lo es.
Pese a los vaivenes de las economías de la región, destaca el incremento en ventas de las líneas Alpha de Sony, y de lentes que hablan de un interés destacable en esta región y da señales donde nosotros estamos presentes y seguiremos empujando este «retorno» a lo clásico y entender por supuesto, que un teléfono inteligente dotado de cámaras y software puede ser un complemento ideal.