Los cambios, ajustes y nuevas estrategias que está llevando adelante la surcoreana Samsung no se detienen, pues a la noticia del acuerdo con la empresa Wintech, el ensamblador de Xiaomi (su rival en China) se suma otra gran noticia, que no dejará a ningún seguidor de la marca indiferente.
Como parte de su revolución interna, Samsung asume los costos de menores ventas de la familia S9 y ello ha forzado a tomar decisiones y golpes de timón enérgicos. Uno de ellos es que la fabricación del próximo Galaxy A6s se hará precisamente en la misma planta donde se fabrican los Xiaomi y la familia de teléfonos Galaxy J se preparan para desaparecer en 2019.
Samsung estaría preparando un reemplazo, tal vez protagonizado por esos teléfonos que ahora se asocian a la línea P y que podrían ser adoptados bajo otra nomenclatura.
También Samsung implementará carga inalámbrica con una potencia de 9 W y cristal para todos sus productos
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