Mientras en Chile la opción del 5G se ve más lejana que hace un año atrás, debido principalmente a las pugnas entre la autoridad y las operadoras, en el resto del mundo, los países con leyes más claras y reglas definidas están ya listos para comenzar a desplegar redes bajo esta nueva tecnología.
De hecho Motorola junto con el operador estadounidense Verizon, comenzarán en 2019 a ofrecer conectividad 5G en ese país y en Europa se espera que el despliegue se masifique a partir de 2020 y es por ello, que para estar preparados a nivel mundial, los fabricantes de teléfonos requieren de nuevos modems con 5G.
En esa línea la firma Qualcomm ya está preparando su procesador Snapdragon 855, destinado en primera instancia a teléfonos de gama alta con sistema Android para el 2019, construido en 7 nanómetros, y que se empleará también en el Apple A12 y probablemente en el Kirin 980 de Huawei, fabricados por TSMC a excepción del Exynos 9820 que fabrica Samsung.
De ofrecer conectividad 5G en teléfonos a automóviles autónomos, hay solo un paso y desde Chile debemos apurar el tranco para no quedarnos estancados en la discusión de pasillo.
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