La ciencia ficción lo predijo hace años y hoy son una realidad. Los automóviles cuentan con cada vez más innovaciones tecnológicas, al punto que en muchos países desarrollados ya circulan vehículos autónomos por las calles.
En América Latina, donde la inteligencia artificial todavía no se ha expandido, ya existen algunos modelos que incorporan tecnología de punta. Ellos son el Citroën C4 Cactus, la Ranger de Ford, los SUV 3008 y 5008 de Peugeot, el Renault Kwid, el Toyota Etios, el Virtus de Volkswagen o los modelos Cruze o Equinox de Chevrolet.
Las características “inteligentes” de estos vehículos se agrupan bajo la sigla ADAS (Advanced Driver Assistance Systems, según sus siglas en inglés), que significa Sistema Avanzado de Asistencia a la Conducción.
Estas herramientas permiten que el chofer lleve adelante una conducción más segura, dado que lo alertarán de cualquier situación que ponga en riesgo su vida, ya sea señales visuales, como luces que se encienden en el tablero, o con alertas sonoras.
Para que esto funcione, los fabricantes instalan sensores distribuidos en el vehículo, similares a los utilizados en la construcción de los autos autónomos.
De esta forma, al igual que como ocurre con la industria telefónica -que ha “bajado” características de los smartphones premium en los de gama media-, la industria automotriz ha incorporado el ADAS a modelos de venta masiva. Esto abre la posibilidad a muchos clientes de gozar con más seguridad y confort a precios accesibles.
Todo apunta a la seguridad
Los asistentes que forman parte de ADAS difieren según el modelo y la empresa fabricante. Sin embargo, todos comparten algunos aspectos.
“Con estos vehículos, por ejemplo, te puedes subir al auto y programar la velocidad, teniendo la tranquilidad de que frenará si otro vehículo está muy cerca. Esto es completamente novedoso para Sudamérica y ya es posible encontrarlo en el mercado”, afirma Juan José Santa Cruz, gerente general de EstoySeguro.cl.
“Si el conductor se desconcentra y se cambia de pista, se activará una alarma para que retome el rumbo. Igualmente, si un conductor intenta adelantar por el lado derecho o está muy pegado al lado izquierdo, el chofer recibirá una alerta para que reaccione. Para el mundo de los seguros de auto esto cambiará todo”, agrega Santa Cruz.
Para quienes están recién aprendiendo o tienen frecuentes dificultades para estacionar, los modelos con ADAS son la solución. “Con estos vehículos inteligentestodo es mucho más fácil. En algunos modelos, para estacionar solo será necesario tocar el volante y pararse de forma paralela a un espacio vacío. La inteligencia artificial hace el resto”, explica el gerente de EstoySeguro.cl.
En tanto, hay otras dos características que serán muy valoradas por las empresas de seguros de autos. Estos vehículos incluyen alertas ─normalmente es el ícono de una taza de café- si el conductor ha realizado varias maniobras errantes o si lleva muchas horas conduciendo, ya que presumirá que se trata de falta de descanso.
En tanto, si los sensores detectan que un neumático está fallando o se está desinflando, lo avisará con el tiempo suficiente para que el chofer pueda reaccionar.
En otras palabras: el auto se ocupa de todo y en todo momento mantiene informado al conductor de lo que está pasando.