Mario Romero.- La llamada «guerra comercial» entre China y Estados Unidos está escribiendo un nuevo capítulo, el cual llega cargado de incertidumbre a meses de las elecciones presidenciales en el país norteamericano.
En previo proceso pre eleccionario, la administración Biden ha anunciado un rudo paquete de medidas proteccionistas contra productos «Made in China» que sin duda enfriarán aún más las relaciones entre ambas potencias.
Si en algún momento el fabricante chino de automóviles BYD pensaba pasear sus sedanes eléctricos por las calles de Manhattan, eso quedará solo en la imaginación de sus ejecutivos, pues ahora se ha impuesto un arancel del 100% a los automóviles, lo que hace impracticable su llegada a Estados Unidos.
A ello se suma un alza importante entre el 25 y 75% de aranceles para baterías y semiconductores e importación sobre chips y células solares.
FURIA CHINA
Tras informarse de las nuevas medidas , el gobierno chino acusó a Estados Unidos de intentar “suprimir” su economía y hoy amenazó con respuestas no especificadas.
«China se opone sistemáticamente a los aumentos arancelarios unilaterales que violan las normas de la Organización Mundial del Comercio y tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar sus derechos e intereses legítimos».
Portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin
NO ES LA PRIMERA VEZ…..
En 2018, la administración Trump anunció fuertes aranceles a las importaciones de acero y aluminio, y amenazó con hacer lo mismo con la electrónica de consumo, lo que generó una guerra comercial, en la que China tomó represalias con sus propios aranceles a las importaciones estadounidenses.
Apple fue una de varias empresas que presionaron contra una mayor escalada, y el director ejecutivo, Tim Cook, se reunió personalmente con Trump en la Oficina Oval.
APPLE Y LAS EVENTUALES REPRESALIAS CHINAS
Si bien Apple ha estado haciendo esfuerzos cada vez mayores para diversificar su cadena de suministro fuera de China, con India ahora como un importante centro de suministro secundario, el tamaño de la tarea hace que este sea un proceso muy lento.
Es sabido que la gran mayoría de los iPhone todavía se fabrican en China, y la última vez se temía que el gobierno de ese país pudiera interferir con la producción utilizando medidas como inspecciones y la principal protección de Apple es que genera una gran cantidad de negocios de fabricación para China, pero las tensiones entre los dos países ciertamente generarán cierto nerviosismo en las oficinas del Apple Park.
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