Mario Romero.- En una sorpresiva medida, el fabricante chino Meizu, ha informado que abandona el mercado tradicional de teléfonos inteligentes para abocarse de cabeza a proyectos de I.A.
La declaración oficial de la compañía reveló que Meizu dejará de desarrollar teléfonos inteligentes tradicionales y optará por centrarse exclusivamente en proyectos impulsados por IA.
Según el anuncio, Meizu ve la IA como el futuro de la tecnología y pretende liderar la carga en este campo transformador. Este cambio estratégico implicará una revisión integral del ecosistema de Meizu, incluida la reconstrucción de su sistema operativo, Flyme OS, para integrar la IA a la perfección.
Uno de los aspectos clave de la estrategia de IA de Meizu es la colaboración y por ello, la compañía planea colaborar con organizaciones y expertos en inteligencia artificial a nivel mundial, como OpenAI, para aprovechar los últimos avances en tecnología de inteligencia artificial.
Al fomentar asociaciones con equipos de primer nivel, Meizu pretende construir un ecosistema de IA sólido que impulse la innovación e impulse a la empresa hacia nuevas fronteras.
Del mismo modo, Meizu ha delineado planes para lanzar seis productos de hardware centrados en IA durante los próximos tres años. Esto incluye la introducción del primer AI Device en 2024, seguida de iteraciones y mejoras en los años siguientes, culminando con el lanzamiento del AI Device PRO en 2026.
El anuncio de Meizu especifica que los proyectos de desarrollo en curso, como los modelos Meizu 21 PRO, Meizu 22 y Meizu 23, se llevarán a cabo a medida que la compañía cambie su enfoque exclusivamente a las iniciativas de IA.
A pesar de encontrarse en varias etapas de desarrollo, estos proyectos de teléfonos inteligentes ya no continuarán, lo que indica un giro decisivo desde la fabricación tradicional de teléfonos hacia el ámbito de la Inteligencia Artificial.
SU FRUSTRADO INGRESO A CHILE
Hace diez años atrás. la firma Meizu hizo los trámites para establecerse en Chile con oficina de representación y de hecho, registró las marcas en INAPI, pero un error imperdonable, como es el haber traído unidades sin el software que SUBTEL exige para su sistema SAE, hizo que el proyecto se abortara a último minuto.