Mario Romero.- Pese a las gestiones intensas y lobby extremo que ha llevado a cabo Estados Unidos contra Huawei, y presionar a gobiernos de todo el mundo para que no usen su tecnología, ya sea en teléfonos o en redes de telecomunicaciones, al parecer es una guerra perdida por Washington.
Hubo un amplio despliegue diplomático y político para que países de la UE, bloquearan a Huawei y ZTE en los procesos de licitación de redes 5G y un reporte de Euronews, demuestra que las gestiones han fracasado.
De los 27 países miembros de la UE, sólo diez países han prohibido o restringido a los proveedores de telecomunicaciones considerados de alto riesgo para su infraestructura de red 5G, según muestran las cifras de la Comisión Europea.
Casi todos los Estados miembros han establecido un marco regulatorio para restringir a los proveedores chinos como Huawei y ZTE, pero sólo unos pocos, como Suecia y Letonia, los han utilizado realmente, según una actualización de un informe de la Comisión al cual se puede acceder aquí
Las cifras publicadas por el ejecutivo de la UE a Euronews muestran que ha habido pocas mejoras desde una actualización anterior el verano pasado, y grandes actores como Alemania simplemente proponen que los operadores de telecomunicaciones eliminen todos los componentes críticos de sus redes centrales 5G para 2026.
El problema de fondo, es que sale mucho más caro reemplazar a Huawei o ZTE que partir de cero.
Huawei, que opera en más de 170 países, siempre ha negado cualquier vínculo con el gobierno de China y dijo que es una empresa privada de propiedad exclusiva de sus empleados. (Eso es un simple modo elegante de decir o plantear propiedad privada, cuando el dueño de todas las empresas chinas es el Estado, gobernado por el PC de ese país.
Lo demás es utopía.
Analistas advierten que la UE necesita una inversión adicional significativa para lograr su objetivo de 5G total y cobertura gigabit total para finales de esta década y se espera que la comisión publique su tan esperado libro blanco sobre la Ley de Redes Digitales para abordar posibles problemas con la financiación de infraestructura, aunque no está claro si el plan hará obligatorias las medidas de seguridad 5G.
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