Como siempre, Sony no defrauda en pantallas y esa «máxima» aplica también para su más reciente teléfono inteligente Xperia XZ2, el cual ofrece un avance algo mezquino en términos de diseño, con un tamaño de 5,7″ proporción 18:9, pero dejando todavía mucho espacio entre la parte superior e inferior, luciendo a estas alturas como si no fuese un teléfono que por lo menos en diseño, se haya renovado del todo.
Algo redondeado en sus bordes, más volumen en su espalda que tiene una sola razón de fondo, y eso es un gran aporte sin duda, pues Sony aplica una suerte de efecto Surround y de vibración al sonido de música y de videos, dandole un toque propio y diferenciador. Si nos quejamos de su estética, que quizás sea de gusto de muchos, al menos es destacable lo que Sony ofrece como experiencia de audio con Clear Bass y otros efectos.
Además por primera vez Sony abandona el lector de huellas en el lateral, dejándolo situado ahora en la parte trasera donde aloja una sola cámara y un flash ofreciendo un sensor Exmor RS de 19MPs, «Made in Home» y deja una reducida cámara frontal de solo 5 MPs brindando una experiencia que al menos en luz natural no hay quejas y que en tomas nocturnas, se percibe ruido. En el apartado de video, ofrece una muy buena cámara lenta, estabilización de imagen y buen resultado de grabaciones en alta definición
El Xperia XZ2 se siente robusto, cómodo y práctico, pero carece de novedad a la vista, aunque Sony se esmere con ganas en el apartado de audio, manteniendo incólume su gran calidad de pantalla y es un dispositivo que fluye bien gracias a su procesador Snapdragon 845 y 4GB de RAM con una duración de batería (promedio) que no supera la media.
Si Sony lograse aplicar todas sus bondades internas en un diseño acorde los tiempos, no cabe duda que sería un producto perfecto.