China e India están enfrentados militarmente con escaramuzas por disputas territoriales, aumentando con ello no solo la incertidumbre en la región, sino que las acciones colaterales que cada bando está tomando, y en ese sentido India está llevando la delantera en el campo tecnológico, pues ha suspendido 50 apps de origen chino como la popular TikTok y se vienen más restricciones.
A raíz de lo mismo, los grandes fabricantes chinos que tienen fuerte presencia en la India, han anunciado que suspenden todo tipo de inversión en el país, deteniendo no solo planes que involucran nuevas inversiones y plantas, sino que directamente la paralización de la producción de sus teléfonos en ese país, y ello afecta a Oppo y Vivo, ambas firmas que no se han acogido a los incentivos tributarios del gobierno, como lo han hecho Apple y Samsung.
Otras marcas enfrentan problemas ya que los envíos se retrasaron, y si se esperaba algo de normalidad post pandemia, todo ello ha quedado en pausa, congelando inversiones por más de US$1.000 millones y el caso particular de Oppo no es menor pues estaba planeando establecer un Electronic Manufacturing Cluster (EMC) en ese pais junto con otras compañías para fabricar productos electrónicos y accesorios de soporte.
Oppo en sus plantas actuales ha detenido la producción tanto para sus propios teléfonos como los de vivo y OnePlus, marcas que pertenecen al conglomerado BBK Electronics, lo que de seguro generará más de algún problema en el país a los que se suma Foxconn, que también había anunciado mayores inversiones, pero con el aumento de la inestabilidad política, estos planes se han suspendido por el momento y tomará bastante tiempo.
Con informacion de India Times
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