Un informe del Korea Herald da cuenta de un gran movida hecha por la surcoreana Samsung, que ha llegado a acuerdo con el proveedor de teléfonos Xiaomi, la firma Wintech, para encargarle la fabricación de algunos de sus dispositivos y de esta forma amortizan costos en su cadena de fabricación y distribución.
Samsung está en plan de reordenamiento en todas sus líneas de producción, y se autoabastece de pantallas, procesadores, memorias, sensores de cámaras, etc, pero las ventas de teléfonos, aún situándose en el primer lugar de despachos durante todo el 2018, no reporta ganancias o bien son ínfimas, y por ende los directivos buscan afanosamente hacer rendir lo invertido. Corresponde a un acuerdo importante, pues es la primera vez que Samsung produce sus smartphones en líneas de fabricación ajenas, en lugar de apostar por las propias.
Los teléfonos de gama alta premium de este año de Samsung, el S9, S9+ y Note9 han sido muy bien recibidos, pero no han tenido ventas intensas, en un mercado mundial que no espera crecer este año y con la amenaza creciente de fabricantes como Huawei y la misma Xiaomi.
MOVIDA ESTRATÉGICA PARA RECONQUISTAR CHINA
Las últimas estadísticas de Strategy Analytics mostraron que la participación de Samsung en el mercado chino retrocedió a 0.8 por ciento en el período de abril a junio y es por ello que el recurrir a un tercero, podría ayudar al menos a reducir los costos de fabricación, mientras que el negocio de teléfonos inteligentes en China se reestructura.
Samsung además ha estado renovando su negocio de teléfonos inteligentes en China desde el año pasado, llevando a cabo reorganizaciones organizativas y tomando otras medidas para mejorar la eficiencia en la distribución y las ventas y para restablecer el liderazgo del mercado de la compañía en China, el jefe de negocios móviles de Samsung, Koh Dong-jin, visita ese país de manera frecuente.
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