Fue un reto de ingeniería y una carrera contra el reloj, desde el momento mismo en que el gobierno chino se impuso poder construir un hospital de emergencia en un plazo record, que pocos creímos posible, pero que se cumplió con precisión, y así poder atender las demandas en la ciudad de Wuhan, el foco del coronavirus.
Más allá del mérito de la obra, en su interior, y como parte de la infraestructura de redes y de comunicaciones, ha sido Huawei, en alianza con el operador estatal de China, que llevó a cabo el proyecto para completar la instalación de internet y el equipo para la plataforma de diagnóstico, días antes de la apertura del lugar.
La plataforma impulsada por la tecnología 5G de Huawei para diagnósticos remotos permitirá a médicos de diferentes ciudades en China y del hospital Huoshenshan trabajen en conjunto para realizar consultas remotas en línea con los pacientes, mejorando la eficiencia y la eficacia del diagnóstico y el tratamiento. Asimismo, el apoyo brindado por Huawei ayudará al sistema de salud de la ciudad de Wuhan.
Además, la compañía de telecomunicaciones donó equipo de video conferencias de alta definición y el software para permitir una comunicación fluida, con conexiones de internet confiables y rápidas, asegurando la recopilación de datos, el tratamiento remoto y otros servicios.
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